No
tiene rostro, es delgado, muy alto y viste de negro. Puede aumentar su
tamaño, alargar sus brazos y piernas o sacar tentáculos de la espalda.
Acecha a sus víctimas por largos períodos, invisibilizándose a voluntad
para pasar inadvertido. Suele inducir trastornos mentales y no se sabe
cómo mueren sus víctimas: simplemente desaparecen…
Todo
comenzó con una fotografía de la década de los ochenta, rescatada entre
los escombros de un incendio ocurrido en una biblioteca de la ciudad de
Stirling, en California, Estados Unidos. En dicha fotografía se podía
ver a un grupo de catorce niños jugando en un parque de la localidad;
pero, al fondo y en actitud de silencioso observador desapercibido,
yacía una inquietante y negra figura masculina: alta (más de dos
metros), sin rostro, con terno negro, con tentáculos, borrosa a causa de
la sombra de un árbol.
Lo realmente perturbador de la
fotografía era la presencia de niños que jugaban alrededor del extraño,
como si no pudiesen verlo pues… ¿a qué niño no le llamaría la atención
de un tipo alto, sin cara y con tentáculos? Mas lo peor vino después, ya
que los niños desaparecieron sin dejar rastro y también Mary Thomas, la
supuesta autora de la fotografía. Jamás se hallaron sus cadáveres…
Después
de lo sucedido con aquella fotografía, muchas otras personas comenzaron
a enviar sus propios testimonios acerca del extraño y alto humanoide.
Surgieron así fotos en que se lo veía en medio de siniestros bosques, de
solitarios y nocturnos paisajes urbanos en que la niebla se fundía con
la luz de los postes, en medio de otros incendios, o incluso adentro de
casas o de construcciones abandonadas. Junto a eso, posteriormente
aparecieron teorías que mostraban como el extraño y tentaculoso
humanoide nos había acompañado desde siglos atrás, como supuestamente
mostraba el mito alemán de The Grossman (reflejado en un famoso grabado
del siglo XVI) o el alû, un ser sin rostro, mitad-humano, mitad-demonio,
propio de las antiquísimas creencias acadias, sumerias y babilonias.
Al
parecer, Slenderman estaba presente en el mundo desde los inicios de la
historia, variando ligeramente sus manifestaciones pero conservando sus
características principales.
Por último, en base a las distintas evidencias e historias es posible afirmar lo siguiente de Slenderman:
Su conducta es sigilosa y acechante
Puede hacerse invisible, incluso de manera selectiva, eligiendo quiénes no lo podrán ver de entre los presentes
Puede distorsionar equipos electrónicos (cámaras y filmadoras incluidas)
Puede modificar su figura hasta cierto punto: alargar sus brazos, sacar sus tentáculos, volverse más alto e intimidante.
Tiene capacidad de teletransportación
Es psíquico, ya que posee don de control mental y además puede inducir locura y trastornos mentales.
Según
ciertas teorías, en el pasado solía empalar gente y sacar órganos,
mientras que en el presente es básicamente un torturador psicológico que
acosa por días o años al objetivo, intercalando lapsos en que está
presente pero invisible (transmitiendo la horrible sensación de ser
observado) con momentos en que se aparece y despierta terror. Sin
embargo, cuando mata no se sabe cómo lo hace; pues, a diferencia del
pasado, ahora simplemente la víctima desaparece sin dejar rastro alguno
Algunas fuentes señalan que Slenderman prefiere acechar a los niños.
Gusta de bosques, de lugares oscuros o poco iluminados, de construcciones abandonadas, de incendios, de sitios con niebla.
Suele acosar por años a quienes lo han visto en su niñez, y en muchos de esos casos pasa años sin hacerse visible.
En
aquellos que no saben que están siendo acosados por Slenderman, sucede
lo siguiente: se deteriora su vida social, física y laboral; se vuelven
olvidadizos; presentan inestabilidad anímica e irritabilidad constante.
The
Grossman: Éste (“hombre alto”) era un humanoide altísimo y aterrador
que vivía en los bosques y se llevaba a los niños que se portaban mal.
La leyenda es de origen alemán y, o bien es falsa, o bien no se puede
encontrar información fiable sobre ella en la web, ni siquiera en
alemán. Su relación con Slenderman implica a unos grabados hechos en
1540 por Hans Freckenberg: en uno se ve a un caballero medieval luchando
con un esqueleto de extremidades anormalmente largas, en otro se ve a
un esqueleto semejante llevándose a unos niños. Se cree que el esqueleto
es una representación de The Grossman. Supuestamente, Hans desapareció
(creen que se lo llevó The Grossman) sin razón aparente en 1543, y los
grabados fueron hallados en el Halstberg Castle a la fecha de 1883.
The
Black Man: Esta leyenda escocesa habla de una entidad malévola de
aspecto semejante al de Slenderman, que merodea por los bosques de noche
en busca de presas… La leyenda es real, y se sabe que la empleaban para
asustar a los niños y evitar que salgan de noche sin compañía, aunque
los fabricantes de hoaxes no tuvieron muy en cuenta eso a la hora de
afirmar que The Black Man y Slenderman eran el mismo ser.
El
Clutchbone: En la versión inglesa (la más importante), esta criatura
tiene figura humana, es muy alta, tiene la piel negra y la cabeza omite
una especie de fuego, a manera de antorcha. Al Clutchbone se le
atribuían desapariciones, muertes por incineración y desmembramiento. Su
origen se remonta a comienzos del siglo XIX y está ligado a la
aparición de rayos globulares (este fenómeno natural efectivamente puede
ocasionar muertes e incendios). Se decía así que los rayos globulares
eran presencias extraterrestres y que el Clutchbone no era de este
mundo, a lo que se sumaba que, por la naturaleza de los potenciales
daños de los rayos globulares, al Clutchbone se le atribuían esos
asesinatos por incineración. Pero su vinculación con Slenderman es
claramente fantasiosa y surgida en la dinámica de los hoaxes, pudiendo
estos llegar a ser tan flagrantes como se ve en un caso
(http://www.nationmaster.com/encyclopedia/The-Clutchbone) donde se
afirma que el Cutchbone (en su versión sueca) pudo ser el responsable de
la muerte de la cantante y actriz sueca Monica Zetterlund, ocurrida el
año 2005 en un incendio que se desató en su apartamento de Estocolmo…
El
Wendigo: La leyenda del Wendigo es real y su origen se remonta a las
antiguas tribus de Canadá y Estados Unidos. Básicamente se parece a
Slenderman en que es alto, delgado y asesino, sin embargo está investido
por un bestialismo y un salvajismo que el sofisticado Slenderman no
tiene, por lo que la asociación entre ambos es tan forzada que llega a
lo absurdo, cosa esta que el lector puede verá si lee sobre el Wendigo.
El
Hupia: En la mitología taína el hupia era el espíritu de una persona
muerta. A los hupias se les atribuía la capacidad de cambiar de forma y
se creía que algunos solían secuestrar gente de noche. Se le asoció con
Slenderman porque el hupia, en su forma humana, suele aparecer como
sombra sin rostro, sin embargo Slenderman es un ente individual e
irrepetible, en tanto que no hay un hupia sino muchos (todo el que muere
se convierte en hupia, según la mitología taína), por ende hay un error
lógico en la hipótesis de que Slenderman y “el” hupia sean la misma
cosa, ya que en realidad debería hablarse de Slenderman y los hupias,
aunque algunos fabricantes de hoaxes han desfigurado el mito para hablar
del hupia como un ser individual y no como un género de seres.
El
Noppera-bō: Es un tipo de fantasma de la mitología japonesa.
Generalmente aparece con forma humana, sobre todo de bella mujer. Es
inofensivo, pero asusta porque sus facciones se van borrando hasta que
sus caras quedan blancas, como la de Slenderman. Nuevamente aquí se
habla de un tipo de seres, mientras que Slenderman es un ente
individual.
Mikoshi-nyudo:
Al igual que Slenderman, este ser de la mitología japonesa es un ente
individual, presentando además importantes semejanzas. En efecto, el
Mikoshi-nyudo es alto y flaco, y crece más y más si lo miras, pudiendo
volverse más alto que los árboles y ocasionando tu muerte si lo miras
demasiado tiempo. En ese sentido —y en el de que está en los bosques y
los caminos solitarios, actuando así en escenarios semejantes a los que
prefiere Slenderman— es muy parecido a Slenderman, sin embargo tiene
diferencias bien acentuadas, ya que es un mendicante y tiene ojos y
cara, además de que se puede espantar si se dice “mikoshita” (“yo veo
más alto”).
El
alû: No tiene rostro, es mitad-humano y mitad-demonio, y su origen se
remonta a las antiquísimas creencias acadias, sumerias y babilonias.
Además, atormenta a los seres humanos mientras duermen, y puede
paralizarlos si los mira, quitándoles el habla y hasta la conciencia. En
la mitología sumeria es un tipo de espíritu o demonio, por lo que su
carácter genérico es suficiente para que no tenga sentido compararlo con
Slenderman. Entretanto, en la mitología acadia es uno de los siete
demonios-utukkis hijos de Anu, siendo que, en este caso, su comparación
con Slenderman carece de sentido porque es un ser puramente mitológico,
mientras que Slenderman pertenece al ámbito de la leyenda.
Pinturas
de cavernícolas brasileños: Supuestamente existen pinturas del año 9000
antes de Cristo en cavernas brasileñas, dentro de las cuales se ve a un
hombre de brazos alargados cargando a un niño. El problema es que no se
sabe si la pintura es real (no hay fuentes fiables que lo confirmen);
y, si acaso lo fuera, sería extremadamente fantasioso asociar ese
grabado con Slenderman, pudiendo deberse a innumerables causas distintas
la largura de los brazos; y eso, claro está, omitiendo que Slenderman
no existe.
Jeroglíficos
egipcios: Existen ciertos jeroglíficos egipcios que muestran a un
hombre con varios brazos. No obstante hay que tener presente que los
jeroglíficos son simbólicos y que los brazos tienen una significación
particular, además de que Slenderman tiene tentáculos, no brazos.
Slenderman: ¿Un tulpa?
Un
tulpa es una entidad espiritual creada por el pensamiento.
Originalmente nace de las visualizaciones que alguien con una mente
psíquicamente muy fuerte (aquellos que tienen abierto el tercer ojo,
particularmente) realiza. Generalmente no llega a adquirir voluntad y,
pese a ser visible para otras personas (además de su creador), suele
terminar desvaneciéndose pues su energía se va consumiendo poco a poco.
El problema nace cuando el tulpa es alimentado con la creencia (creen en
él) o el miedo, entonces puede cobrar una vitalidad extraordinaria y
llegar a ser una entidad dotada de voluntad, que vivirá indefinidamente
mientras sigan creyendo en él, más aún si le temen. Se especula así que
Slenderman es un tulpa, y que sigue vivo porque aún muchos creen en él y
le temen…
Las sombras: una muy probable realidad detrás de la leyenda.
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Capturas de la miniserie de youtube Marvel Hornets |
Los
fantasmas-sombras (también llamados “shadow people” o “gente de las
sombras”) pertenecen mucho más al mundo de la Parapsicología que al de
la leyenda. Muchas son las fotos reales (en el sentido de no ser fakes
intencionales) en que aparecen sombras humanas que no tienen una fuente.
Se trata de un tipo particular de fantasma que siempre está compuesto
de energía negativa, que tiene malas intenciones, habita en los bajos
planos astrales (en los niveles sórdidos del más allá, por decirlo de
forma coloquial) y se alimenta de emociones y sentimientos destructivos
como el rencor y el odio. Mas su alimento favorito es el miedo: no a
cualquier cosa, sino a su presencia.
Al igual que Slenderman, estos
espectros son altos, delgados,
y prácticamente nunca hablan (Slenderman no lo hace nunca). Además,
suelen producir parálisis de sueño y sus ataques se reportan de noche,
cuando la persona duerme, ya que es allí cuando aprovechan para drenar
su energía, produciendo un aterrador despertar en que la víctima siente
que la intentan ahogar y, en algunos casos, puede ver con claridad a la
sombra, que prácticamente siempre está encima… Escalofriante es pensar
que probablemente fue este tipo de espectro el que inspiró la concepción
mitológica del alû sumerio o de la hupia de la mitología taína. Y, ya
en nuestros tiempos, es muy probable que muchos conocedores de
Slenderman hayan visto un espectro-sombra, interpretándolo como
Slenderman ya que en las representaciones de éste no siempre se le
distingue claramente el terno, apareciendo incluso como mera sombra en
algunos casos. La hipótesis cobra aún más fuerza si se tiene en cuenta
que las sombras generalmente viajan en grupo; mas, cuando una sombra
aparece sola, es más poderosa que una sombra normal, y suele ser más
grande y densa…
Cuando veas a Slenderman, reza porque termine rápido contigo...
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